Gracias a toda la atención que se le está dando al medio ambiente, desafortunadamente en eso queda porque no se llega a la acción, se han dado cuenta que el ganado (léase todos los animados criados para su explotación) son grandes contribuidores del calentamiento global. ¿Cómo? por la emisión de gas metano. Claro si hablamos de una sola vaca el impacto es mínimo pero en el caso de la India donde existen 485 millones de ganado (bovino, caprino y ovino) las consecuencias son a gran escala (han calculado que estos animales están produciendo 11.75 millones de toneladas métricas del gas, aun mas que todos los carros de la nación). El panorama es bastante oscuro pues el crecimiento poblacional de esta nación la cual supera el billón de habitantes y el incremento del poder adquisitivo harán necesaria una mayor producción de leche y sus derivados.
¿Qué se puede hacer? Como es muy difícil que los indios dejen de consumir los productos provenientes de los animales por una dieta vegetariana, el gobierno está tratando de descubrir cómo hacer para que el animal produzca menos gas metano, sin embargo esto está siendo más difícil de lo imaginado por las siguientes razones: la medicina y tecnología disponible en los países desarrollados es sumamente costosa para el pobre productor de la India, por consiguiente tienen que conseguir de una forma barata algo que haga que los animales sean menos "gaseosos" pero al mismo tiempo que no afecte la producción que es a lo que a la mayoría de la gente le interesa. Otra alternativa sería utilizar el estiércol como biogás, el cual ya se utiliza en varias partes de la India, para cocinar o como combustible para vehículos.
En Nueva Zelanda donde 45 millones de ovejas y 10 de vacas producen el 90% de las emisiones nacionales de metano además de utilizar una dieta rica en tanino para reducir la producción de gases en la digestión, se están explorando otro tipo de soluciones para este problema. La pequeña nación oceánica firmo el tratado de Kioto la década pasada y se comprometió a reducir sus emisiones a los niveles de 1990 antes del año 2012. Una idea que ha suscitado bastante malestar entre los ganaderos es la del "Gas Tax" que consiste en imponer sanciones monetarias a los propietarios de los rumiantes para utilizar ese dinero en investigaciones sobre cómo reducir la emisión de gases. El impuesto no ha sido instaurado por la oposición de los granjeros sin embargo ya están estudiando modificaciones genéticas para hacer que el animal tenga menos gases.
Entonces, como muy seguramente tanto ustedes como yo preferimos los productos lácteos y la carne a una dieta netamente vegetariana lo más probable es que el problema continúe. Ojalá tanto los investigadores indios como los neozelandeses encuentren una solución pronto para que no le dé tiempo a nuestros gobiernos de emular el esquema de tener que pagar hasta por tirarse un pedo, porque como por estos lares no tenemos tanto ganado muy seguramente nos impondrán el gravamen a nosotros.
El ganado asesino
domingo, 12 de abril de 2009 | Publicadas por Prometeo a la/s 3:35 p.m.
Etiquetas: animales, clima, medio ambiente
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