Sueños que se hacen realidad

Recientemente pude realizar uno de mis grandes sueños en el área de entretenimiento. Ver a Madonna en vivo. Tenía que ser ahora porque aunque la llamada “reina del pop” sigue viéndose regia, por más Kavala que uno haga el tiempo no pasa en vano, y es que ella ya tiene más de 50 abriles encima. El espectáculo no pudo ser mejor y a pesar que me toco “volar” hasta 3 horas para verla, creo que el cumplir este anhelo justificó cada centavo de esta “inversión” para el alma.

Es chistoso ver como poco a poco muchos sueños se nos hacen realidad, pero al mismo tiempo que se cumple uno de estos deseos nos encargamos de ir creando muchos más. Hasta hace unos años siempre pensé que el ser humano era inconformista por naturaleza, que era esa naturaleza acaparadora, avara y mal agradecida lo que hacía que el hombre (como especie) siempre quisiera mas y nunca nada era suficiente a pesar de lo que ya tuviera.

Pero un día cualquiera, del que honestamente no recuerdo todos los detalles, un punto de opinión distinto me fue revelado. Fue una de esas opiniones o momentos, que muy seguramente todos tenemos en nuestras vidas, las cuales nunca fueron supuestas para ser trascendentales, pero de todas formas se nos grabaron en la memoria (otra que tengo muy presente es ese mito que si uno come sandia y toma alcohol, se muere….. yo sé, para morirse de la risa).

Pero retomando el tema, lo que esta persona expuso fue que si nosotros no fuéramos así de inconformistas el mundo perdería muchas posibilidades. Si la sociedad se contentara con lo que tiene o consiguió muy probablemente el avión no se hubiera inventado, el carro y el Internet no existirían, la mujer seguiría sin poder votar y los negros continuarían esclavizados. Es más, América muy probablemente nunca hubiese sido descubierta (aunque esto necesariamente no tiene que ser visto como algo bueno).

Es claro que el inconformismo crónico es algo aburridor que no está bien, pero podríamos decir que es un mal necesario (algo así como las enfermedades, para crear curas o el amor para conocerse a uno mismo y a otros a pesar de los sufrimientos) para poner a trabajar nuestra imaginación. Esa continua búsqueda de algo nuevo es lo que hace que la ciencia avance, que nosotros tratemos de superarnos y que yo ahora comience a planear como ir a un concierto de The Killers y Keane, sin dejar de lado a U2.